La importancia de la pediatría en la prevención infantil
Una de las mayores preocupaciones de un padre es la salud de su hijo, en la cual el pediatra desempeña una labor esencial en el adecuado desarrollo del niño y en la prevención infantil. Por eso, en este post te contamos qué importancia tiene la atención pediátrica en la vida del pequeño y su impacto en la etapa adulta.
La pediatría como prevención
La pediatría es la especialidad médica que se ocupa de la salud de los niños desde el momento en el que nacen hasta su adolescencia, y es una de las ramas de la medicina con mayor enfoque en la prevención. Sin embargo, el límite de edad de esta atención varía entre las distintas comunidades autónomas. Lo habitual en nuestro país es que cuando cumple 14 años pase al médico de Familia, pero hasta en 6 regiones (Madrid, País Vasco, La Rioja, Aragón, Castilla-La Mancha y Andalucía) los padres pueden decidir entre llevar a sus hijos a un pediatra o a un médico de Familia, aunque el niño sea mayor de 14 años. Esta opción de poder acudir a un pediatra hasta los 18 años es una tendencia que se sigue en la mayoría de los países europeos y que muchas asociaciones de pediatras españoles defienden. ¿Por qué?
La atención pediátrica hasta los 18 años permite prevenir hábitos perjudiciales en adolescentes, como el tabaco o la obesidad, según afirma la Sociedad Valenciana de Pediatría (SVP), ya que es una de las etapas más decisivas de la vida en la que una prevención temprana es fundamental para una buena salud en el futuro.
La edad media del inicio de consumo de alcohol en España se sitúa en los 13-14 años, por lo que si el seguimiento que realiza el pediatra desde la infancia del niño se prolongara hasta los 18 años se lograría reducir, por ejemplo, el consumo de alcohol entre los jóvenes, al igual que las enfermedades de transmisión sexual.
Visitas periódicas al pediatra
Como hemos comentado anteriormente, el cuidado de la salud en la etapa infantil contribuye a que los niños alcancen un completo desarrollo, tanto físico como emocional, por eso es importante conocer con qué frecuencia debes llevar a tu hijo/a al pediatra. A continuación, te detallamos las visitas que los especialistas recomiendan:
- La primera evaluación se realiza en el momento de nacer. Tras el parto, un pediatra le realiza una revisión al bebé y se monitorizan sus primeras horas de vida.
- Otras consultas fundamentales son durante la primera y segunda semana del recién nacido para aplicar la primera vacuna. A partir de entonces, el resto de vacunas necesarias se pondrán cada dos o tres meses.
- Hasta que el niño cumpla un año se recomienda una revisión a los 2, 4, 6, 9 y 12 meses. Después, a los 15 y 18 meses.
- Y a partir de los 2 años se aconseja llevar al niño al menos una vez al año.
Ahora que ya sabes el importante papel que desempeñan los pediatras en la infancia y adolescencia de los niños, lleva a tu hijo con regularidad a su consulta. En el cuadro médico de AFEMEFA encontrarás a los mejores profesionales que estarán encantados de atenderte.