VACUNA DE LA MENINGITIS B: ¿POR QUÉ HAY LISTA DE ESPERA?
Un año después de que se pusiera a la venta la vacuna de la meningitis B (Bexsero), sigue habiendo una larga lista de espera para adquirirla en las farmacias. A pesar de que se trata de una enfermedad con una incidencia muy baja, puede causar secuelas graves o incluso la muerte y, por tanto, es normal que miles de padres en todo el país hayan acudido a las farmacias solicitando las dosis de esta vacuna.
¿Qué es la meningitis?
La meningitis es una inflamación de las membranas que cubren el encéfalo y la médula espinal, denominadas meninges. Dicha inflamación está causada por una bacteria, conocida como meningococo, que afecta especialmente a niños pequeños y adolescentes. Aunque la infección se puede tratar con antibióticos, el tratamiento puede resultar ineficaz, de ahí que se recomiende la vacunación.
¿Cuáles son sus síntomas?
Los síntomas suelen aparecer de forma repentina y se suelen manifestar en forma de fiebre y escalofríos, náuseas y vómitos, dolor de cabeza intenso, cuello rígido, irritabilidad, hinchazón de la parte superior de la cabeza (fontanela), etc. En el caso de que existan sospechas sobre un posible caso de meningitis, es necesario acudir rápidamente al hospital para que la enfermedad pueda ser detectada y tratada de manera adecuada. La meningitis B es una enfermedad muy seria, ya que puede resultar letal en un 20% de los casos y dejar secuelas hasta en un 30% de quienes la sufren.
¿Quiénes deben vacunarse?
Aunque se trate de una vacuna no incluida en el calendario de vacunaciones, la Asociación Española de Pediatría aconseja que le sea administrada a todos los niños a partir de los 2 meses de edad. El número de dosis varía de 2 a 4 dependiendo de la edad a la que se inicie la vacunación y el precio de cada una de las dosis es de 106 €.
¿Por qué hay tanta lista de espera para conseguirla?
La vacuna se puede adquirir con prescripción médica en las farmacias españolas desde octubre de 2015, pero desde entonces la demanda ha sido siempre más alta que la oferta. Se esperaba que para finales de 2016 este desequilibrio se hubiera ajustado, pero por el momento parece que habrá que esperar unos cuantos meses hasta que esto se produzca.
Este retraso se debe a un doble motivo: por un lado, el proceso de fabricación de la vacuna es lento (dura unos 9 meses) y, por el otro, parece que los fabricantes no quieren tener problemas de falta de demanda al tratarse de una vacuna no obligatoria y producen solo las dosis necesarias para cubrir las solicitudes actuales.
Todo esto está provocando más de un quebradero de cabeza a los padres. Alarmados por la gravedad de los efectos de la meningitis, acuden a las farmacias para asegurarse de que sus hijos tienen las dosis necesarias para vacunarse, pero se encuentran con una larga lista de espera que no parece tener solución a corto plazo.
