MANIOBRA DE HEIMLICH: QUÉ ES Y CÓMO APLICARLA
En los últimos días hemos conocido el fallecimiento del cirujano Henry Heimlich, creador de la maniobra de primeros auxilios utilizada para evitar que una persona se asfixie por atragantamiento. Vamos a recordar en qué consiste la maniobra de Heimlich y cómo debemos aplicarla correctamente.
Qué es la maniobra de Heimlich
Se trata de una técnica de primeros auxilios que deberemos emplear cuando percibamos que una persona se ha atragantado con la comida o con algún objeto y se está asfixiando. La asfixia se produce por la obstrucción de las vías respiratorias y puede llegar a provocar daños cerebrales o incluso la muerte en apenas 4 minutos, por lo que es importante que reaccionemos con rapidez si detectamos estos síntomas en alguna de las personas de nuestro alrededor. El objetivo que buscaremos con la aplicación de la maniobra es expulsar el objeto que está causando la asfixia para que pueda entrar aire en los pulmones.
Cómo aplicarla
Antes de comenzar la maniobra, debemos asegurarnos de que la obstrucción de las vías respiratorias es total y no parcial. Si la víctima está tosiendo, no deberemos actuar y nos limitaremos a animarle a que lo siga haciendo, ya que la tos le ayudará a expulsar el objeto extraño.
En el caso de que la persona esté consciente pero no emita sonido alguno, procederemos a efectuar la maniobra de Heimlich siguiendo estos pasos:
- Estando de pie, nos situamos detrás de la víctima y rodeamos su cintura con nuestras manos.
- Colocamos nuestra mano derecha con el puño cerrado y el pulgar hacia dentro en la boca del estómago de la persona. La mano izquierda la situaremos sobre la derecha para sujetarla.
- Realizamos compresiones rápidas hacia arriba y hacia dentro (entre 6 y 10 repeticiones). En el caso de que no dé resultado, repetiremos la operación.
Si tienes dudas de cómo realizar la maniobra, puedes ver este vídeo explicativo.
Aspectos a tener en cuenta
Realizando los 3 pasos anteriores de forma correcta deberíamos solucionar el problema en la mayoría de los casos. Sin embargo, es necesario tener en cuenta otros aspectos:
- La maniobra de Heimlich debe realizarse con cuidado para no dañar las costillas o los órganos internos.
- En el caso de bebés menores de dos años, deberemos tender al niño boca arriba sobre una superficie rígida. Apoyaremos una mano encima de la otra entre el esternón y el ombligo y, con mucho cuidado, empujaremos varias veces en dirección al tórax.
- Si la víctima pierde el conocimiento, deberemos llamar inmediatamente a los servicios de emergencia.
- Si te encuentras solo, puedes aplicarte la maniobra apoyándote en el respaldo de una silla para que la presión dentro de tu pecho se incremente rápidamente y así el objeto salga expulsado.
Se calcula que la maniobra de Heimlich ha salvado unas 100.000 vidas desde que se ideó en 1974. Una de las últimas, el pasado mes de mayo, cuando el propio Heimlich la utilizó para socorrer a una anciana que se había atragantado con una hamburguesa.