Qué debes saber sobre las fontanelas del bebé
A muchos padres primerizos les preocupan los puntos blandos de la cabeza de su bebé, lo que se conoce como fontanelas. Por este motivo con el objetivo de tranquilizar a todos los padres, a continuación, te explicamos todo lo que deber saber sobre las fontanelas de los bebés.
ÍNDICE
¿Qué son las fontanelas de los bebés?
La fontanela es una abertura que se encuentra normalmente en el cráneo del bebé. Se trata de membrana, flexible y resistente, situada entre los huesos del cráneo, que aún no se han cerrado bien porque no han crecido lo suficiente como para poder unirse.
Su función es proporcionar elasticidad a la cabeza del bebé para permitir la salida, a través del canal de parto, sin dañar el cerebro. También sirve para el crecimiento de la cabeza y para que haya un desarrollo adecuado del cerebro.
Aunque parece que solo hay un punto bando en la cabeza del bebé, en realidad existen dos: la fontanela anterior, más grande y evidente, encima de la cabeza y con forma de rombo, y fontanela posterior, más pequeña.
Por tanto, no es nada de lo que haya que preocuparse. Son sencillas de cuidar y tienden a cerrarse por sí solas, como veremos a continuación.
¿Cuándo se cierra la fontanela del bebé?
Con el tiempo, a medida que los huesos del cráneo se cierran, los espacios entre los huesos se van llenando. Esto suele ocurrir desde los seis meses hasta los dos años, aunque todas las fontanelas no se cerrarán al mismo tiempo.
El pediatra revisará este proceso durante los controles de rutina y medirá la circunferencia cefálica para evaluar el crecimiento de la cabeza del pequeño.
En algunos casos, el estado de la fontanela puede ser indicativo de la salud del bebé:
- Si se cierra demasiado pronto, podría ser síntoma de alguna enfermedad congénita.
- Si tarda en cerrarse puede señalar una dificultad en el proceso de osificación.
Algunas de las alteraciones de la fontanela pueden estar provocadas por enfermedades raras, lo cual será diagnosticado por un especialista.
Aspecto de una fontanela normal
Para asegurarse de que la fontanela del bebé esté bien debes saber lo siguiente.
- La fontanela del bebé es firme y se curva ligeramente, lo cual quiere decir que no debe estar hinchada o abultada, ni hundiéndose en el cráneo del bebé. No obstante, cuando el niño llora, está acostado o vomita, puede ser que la fontanela se muestre un poco abultada o elevada, pero siempre que vuelva a la normalidad cuando el niño está tranquilo y erguido, será algo normal. En todo caso, se debe acudir al pediatra cuanto antes si se nota que la fontanela se está muy hundida, ya que puede ser una señal de deshidratación, o si la fontanela está abultada podría tratarse de un síntoma de aumento de la presión en el cerebro, debido a una infección, una acumulación de líquido o un traumatismo craneal.
- Por otra parte, es posible que percibas que la fontanela está latiendo. Es normal, pues se trata de una zona que está muy vascularizada y que sube y baja con el latido del corazón.
- Asimismo, puedes tocar la fontanela del bebé sin ningún problema, mientras lo hagas de forma suave y con cuidado, no será doloroso para el pequeño. Se le puede poner la ropa y lavarle el pelo, sin peligro ninguno.
Cualquier duda que te surja sobre las fontanelas del bebé, consulta con un especialista en pediatría.
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