HIPOTERMIA. Consecuencia de las bajas temperaturas. Parte I
Durante el invierno nos exponemos al frío y éste nos puede acarrear un gran número de problemas de salud que pueden llegar a ser muy graves si no tomamos las medidas pertinentes de protección. Desde un enfriamiento leve que puede calmarse volviendo a recuperar la temperatura corporal entrando en un sitio cálido o aumentando el nivel de protección del cuerpo e incluso tomando algo caliente que ayude al cuerpo, hasta los casos más graves que pueden ser una congelación o una hipotermia y que nos pueden conducir a la muerte.
DIFERENCIA ENTRE HIPOTERMIA Y CONGELACIÓN
Primero vamos a conocer la diferencia que hay entre la hipotermia y la congelación
Por un lado la hipotermia es una de consecuencia de las bajas temperaturas donde la temperatura disminuye por debajo de los 35ºC. Se produce por una bajada abrupta de la temperatura del cuerpo que nos provoca una disminución de la atención, temblores o incluso puede llegar a hacernos perder el conocimiento. Es en todo caso una urgencia.
Por otro lado, una congelación es cuando una parte del cuerpo la exponemos al frío más extremo durante mucho tiempo y este se congela al cristalizar las células de esa zona del cuerpo y provocando la deshidratación de las mismas.
Es importante saber que, si tienes alguna enfermedad cardiovascular o diabetes, tomas alguna medicación que te haga más débil al frío o bien eres una persona que no lleva una dieta adecuada, o mayor , o que está bien físicamente, eres más propenso de sufrir un ataque de frío de importancia.
SÍNTOMAS DE LA HIPOTERMIA
Normalmente la hipotermia aparece de manera gradual y la víctima realmente no es consciente de que la está sufriendo. Según desciende la temperatura del cuerpo se distinguen 3 fases que se caracterizan por los siguientes síntomas.
PRIMERA FASE
Cuando el cuerpo nota que está perdiendo calor, las partes más alejadas del cuerpo (las manos y los pies) pierden flujo sanguíneo como mecanismo de defensa del cuerpo y conseguir así mantener calientes los órganos vitales. Esto provoca escalofríos, con los temblores se gastan más calorías y aumenta el ritmo en la respiración y el corazón. Además empiezan a entorpecerse las manos y los pies porque los músculos de esas zonas empiezan a no responder.
SEGUNDA FASE
Los escalofríos y los temblores se vuelven cada vez más violentos, los movimientos se hacen torpemente y se ve una evidente descoordinación. Aunque la víctima de hipotensión parezca alerta, está pálida y los labios, las orejas y los dedos comienzan a ponerse de un color azulado.
TERCERA FASE
En esta fase la piel ya está poniéndose en tono azulado, los movimientos son muy difíciles y los temblores no paran. La víctima comienza con una especie de letargo, le empieza el sueño y comienza a tener confusiones mentales y comportamientos raros e irracionales. En un rato, los órganos vitales empiezan a fallar y aparece la muerte clínica, aunque aún no se ha producido la muerte cerebral que se produce unas horas más tarde.
CAUSAS MÁS COMUNES DE HIPOTERMIA
Las causas más comunes de hipotermia son:
- Llevar poca ropa o que ésta no sea adecuada para las temperaturas bajas.
- Mojarse o sumergirse en aguas frías.
- Estar con ropa húmeda cuando hace frío o viento durante mucho tiempo.
- Hacer esfuerzos extremos sin ingerir suficiente comida o bebida en climas fríos.
¡Atención! Si aparece confusión o alteraciones mentales, se debe llamar de inmediato al número de emergencias, en España el 112.
Hay que tener especial cuidado con los niños pequeños porque pierden la temperatura del cuerpo más fácilmente que los adultos, y son más susceptibles a la congelación y la hipotermia ya que tienen una superficie de evaporación grande, un control inmaduro de la regulación de la temperatura corporal y una capacidad de producción de calor reducida.